miércoles, 29 de mayo de 2013

Sin, pero non

El numeroso grupete de esta ocasión (falta el gran Churla que se fue a trabajar el muy titán);
arriba: Sergio Júnior, Chema, Abel, Roger y el agüelo; 
en medio: Silvia, Ignacio, Tono, Issac, Jessi, Guara y el Enfedaque)

Tenía reservado desde hace unas semanas este finde: Koldo, un amiguete alavés, me había invitado a acompañarle junto a otro compi suyo a hacer una ruta a la que tengo muchas ganas desde que empecé a visitar el Pirineo allá por los años 80, la norte clásica del Perdido. El plan era llegar el sábado hasta el Balcón de Pineta para dormir en el refugio de Tucarroya y subir a cima el domingo. Sin embargo, el frío y el viento que vaticinaban para el sábado me echaron para atrás y me conformé con una jornada más en Rodellar dedicada a buscar de nuevo la fuerza. Esta vez parecía que sí. Nos fuimos el sábado en el día un par de coches desde Zaragoza, por un lado Tono y su hijo Ignacio, Chema y Júnior y por otro Abel, Dani Enfedaque y el agüelo, más Churla que iba en su propio coche porque él se volvía pronto para trabajar a la tarde, cada uno por su cuenta, y el grupo de belverechos que se quedaron todo el fin de semana. Cada uno empezó donde quiso y luego nos juntamos todos a echar risas y a compartir vías y vuelos en el Camino, cuando el calorcito empezó a notarse (porque al mediodía no había quien estuviera allí; toda una imagen para recordar: el Camino totalmente vacío un sábado de buen tiempo al mediodía en pleno mes de mayo). Nosotros emigramos a calentar, todo chulos, al solecico de Roxy la palmera, 6b+. Los dos abuelos, más perros que niebla, le dejamos al jovenzano del grupo poner las cintas. Dani se portó como un titán, por algo está entrenando últimamente con titanes, y llega a la cadena con un par de "reposos". En el siguiente turno conseguimos llevárnosla todos. Para entonces el sector se había petado de gente y nos volvemos al Camino más contentos que chupita los 3.
Con semejante comienzo me hago ilusiones y me meto de nuevo en Dónde está Wally? Pero con la ilusión sólo no se encadenan vías y la pila se volvió a terminar en el mismo punto, aproximadamente: la antepenúltima chapa. Los siguientes intentos sólo sirvieron para deleitar al personal con los vuelos de todos los colores que se sucedieron.
No me llevé la vía a la libreta, una vez más, pero los antebrazos y, sobretodo, los dedos se quedaron bastante doloridos. Buena señal. La fuerza no apareció, pero la sigo buscando.
 El Enfedaque en los primeros metros de Roxy la Palmera...
 ... y Abel en los estupendos últimos
 Mientras unos descansan al sol en el camino...
... otros averronchan y de qué manera para llevarse Billy el rápido, 7a/+

4 comentarios:

Juan korkuerika dijo...

Fanáticoooooosssssss que estais enganchadooosssss jajajajjajaaj Hasta la vista alpinistaaaa

Iñaki dijo...

Mucho más de lo q nunca pude imaginar , sólo pienso en diseñar entrenos xa superar esa vía
Jajajaja

Patri dijo...

que tios mas pesados con Rodelarrr..de verdad!jiji, Esa vía la tienes, no necesitas más que llegar descansado!aupa Iñaki!

Iñaki dijo...

sí q soy pesadete, pero no te preocupes q la temporada se termina en junio, a partir de ahí me animaré a probar otras escuelas, Patri