martes, 20 de noviembre de 2012

Calcena, años después


Un finde más de tiempo incierto y decidimos, Diego, Abel y el agüelo, no arriesgar e ir a Morata, más con el ánimo de tomarnos unas bravas en el bar la Plaza que de escalar. La niebla que envuelve Zaragoza se disipa un poco nada más pasar La Muela, pero nuestro optimismo termina al pasar el alto de la Perdiz y comprobar la espesa niebla que tapa casi por completo el pueblo. Pasamos de largo sin parar rumbo a Calcena. Recalculando ruta a toda prisa, desechando otras opciones como Torralba de los frailes, con la esperanza de que la altura a la que se encuentra Calcena detenga las nieblas. El plan sale bien, pero no tenemos reseñas, así que aparcamos al lado del buzón y sin jamarnos mucho el coco vamos al sector más próximo al coche, la Peña de la Mesa. Hacía años que ninguno de nosotros pisaba esta solitaria y curiosa escuela de escalada y nos llevamos un pequeño chasco. La roca que catamos no era muy buena, la mayoría de los pies parecían cascarilla al comienzo de casi todas las vías. Además la roca estaba helada en las primeras vías y no sentíamos las yemas de los dedos. En cuanto el sol calentó un poco la roca las sensaciones mejoraron un poco.
Después de probar 3-4 vías en este sector nos fuimos al de enfrente, la Aguja Sninfo para hacer una disfrutona vía, Pequeña desconocida, que nos recomendó Abel. La mejor del día. Dejamos que Diego se cansara los brazos en un par de vías ponzoñosas más y nos bajamos al refu a reponer fuerzas.
El guarda, Diego, nos recomendó, para otra ocasión, un par de sectores, La fuente y la parte alta, cerca del collado. Pasamos un buen rato charrando con él sobre las graduaciones de las vías y la calidad de la roca.
El domingo Bartolo terminó de rematarme con una carrera por los barrancos de Santa Fe. Aún no he recuperado mis piernas del todo.

 Sector Peña de la Mesa (izda), justo enfrente del buzón con reseñas:
en verde, Jesús (6a+), azul, Purriano (6a), violeta, ? (6c) y rojo ?? (7a)
 Diego en la terrible pplaca del 7a
 El agüelo disfrutando de Pequeña desconocida, 6a+/6b
 Abel desmontando la misma vía
El trío justo antes de plegar al refugio donde nos calzamos unos piazos de bocadillos y unas cerves

viernes, 2 de noviembre de 2012

Todo tiene fin

  
Y este era el día de mejor meteo de todo el puente...

Para Intentar aprovechar de la mejor manera posible que ninguno de los 3 trabajábamos hoy hemos hecho una nueva visita a Riglos. Hemos salido tarde, con la calma, y nos hemos encontrado el lugar asediado de cordadas y el párkin a rebosar. La crisis.
La vía elegida es corta y de equipación deportiva, Todo tiene fin. Abel ya la hizo la primavera pasada cuando aún se estaba recuperando y tenía ganas de repetirla en mejores condiciones. Son 5 largos de roca excelente y presas generosas, surcada por una infinidad de panzas de todos los colores. 
En un nuevo signo de que los tiempos están cambiando hemos hecho la vía a pachas, la hemos semiencadenado (de hecho hemos encadenado el 98% de la vía, así, aproximadamente) y a pesar de empezar a la 1 del mediodía aún hemos bajado a plena luz y sin necesidad de hacer uso del frontal (y eso que teníamos en la cordada a uno de los Galve, todo un logro).
Dos días intensos de escalada disfrutona que nos han puesto los brazos y la ilusión por las nubes.

Recorrido aproximado de la vía
Los abuelos y el jovenzano, que no paró de dar mal, al final de la vía
Recuperándonos de la dureza de este deporte en el bar de la piscina de Ayerbe
(Jorge promete apuntarse más veces con los agüelos)

Buenagarre

La cuadrilla preparada en el párkin
Me pasé todo el invierno pasado intentando convencer a Abel para ir a escalar a esta escuelilla en los límites orientales de Aragón. No hubo manera de convencerle: que menudo zarrio, que una mañana nos acabamos las pocas vías... Y ha tenido que pasar un año hasta que esta estupenda escuela, de buena roca, de cacho generoso y una orientación sur estupenda para el invierno, tuviera su oportunidad. Y por el entusiasmo de Abel no creo que sea la última de esta temporada.
Nos juntamos una cuadrilla importante acompañando a los mayores de la EEMA en su segunda salida a roca. La verdad es que no se pueden quejar, ¡vaya lujo de salidas! Primero Vadiello y ahora Benabarre.
La escuela tiene vías de todas las dificultades, excepto duras duras para los megafuertes, ya que van desde el V+ hasta el 7b, aunque las que más predominan son las que rondan, tanto por arriba como por abajo, el 7º grado. Para llegar a ella hay que coger un cambio de sentido nada más girar hacia Lérida en el cruce al final del pueblo (viniendo desde Zaragoza). Al final del cambio de sentido una corta pista nos deja en un amplio prado donde se aparca el coche. El camino comienza a la derecha de un cartel que pone "Molino harinero". Una fuerte pendiente salvada con peldaños de madera nos lleva en un par de minutos a la zona de escalada.
Croquis de las vías, faltan media docena equipadas en 2011
Oteando vías
 Pincho dándolo todo, como siempre
Todos a la rocaaaaaa
Galve atacando el mega techo de El último jamaicano
 Júnior apretando en El llanto de Belcebú
El agüelo disfrutando de las excelentes vistas de Belladonna
  o 1er intento de pagar una cena a la cuadrilla de gorrones
 Vistas del sector desde el camino
 Charlando de lo de siempre en un bar de Benabarre