martes, 30 de marzo de 2010

Intento al Puro de Vadiello





Vista de la cara sur del Puro durante la aproximación

Vadiello es una de las zonas de escalada que aún no conocía. Así que engañé a Chema para cambiar de planes, dejar Masmut para otra ocasión y aumentar la cuadrilla con destino a este hermoso paraje. Vadiello está muy cerca de Huesca. Se accede a ella por la salida de Lérida y luego nada más subir la primera cuesta se coge una carretera (HU-330) a la izquierda que nos lleva sin pérdida al pantano de Vadiello.
El elevado número de compis en esta salida ya hacía presagiar que la jornada iba a ser más éxito de convivencia que de escalada, como así fue. 3 cordadas en la misma vía, por muy corta que sea siempre conlleva un tiempo extra. Eso sí, no hubo aburrimiento en las reuniones, frío sí, pero nada de aburrimiento. Porque lo único que le faltó a esta jornada, además de llegar a cima, fue el buen tiempo que nos engañó desde el principio. La aproximación la hicimos al solecillo, sin apenas viento, sudando y maldiciendo el exceso de ropa. Pero en cuanto llegamos al pie de vía en el lado norte del puro, y por lo tanto en sombra, toda ropa fue poca. Además del frío viento, que se llevó nuestros escasos ánimos, los dos únicos largos que hicimos fueron ambos en artificial, el 2º desplomaba lo suyo, y quitando a los dos abuelos ninguno más tenía mucha idea de acerar correctamente o de usar los estribos sin dejarse el alma en ello. Así que pasamos un rato largo y bien divertido entre consejos y torpezas. Ana intentó el 3er largo, pero no encontró bien la vía, había trozos húmedos y roca suelta y se bajó. Estos datos terminaron por rematar nuestras ganas de escalar y nos bajamos todos en busca de calorcito y comida para rellenar los vacíos estómagos. Para el recuerdo quedó la frase mítica del día, que fue algo así como: "Estoy acerado y ahora, ¿cómo me suelto?" En fin que se va a notar que han estado con el agüelo.


Zona: Vadiello
Vía: Normal al Puro, V+/Ae
Compañeros: Abel, Ana, Jorge, Vanesa, Chema y el agüelo
Fecha: Sábado 27 de marzo de 2010

Reseñas sacadas de la web del club Peña Guara

La aproximación se inicia en el párkin de la presa de Vadiello, al lado de un cartel que nos indica la restricción de escalada por nidificación (que no leímos y de la que no tuve noticia hasta no leerlo en el blog de Aragon en vertical), donde nace un sendero que se dirige al Pico del Boron. Las vistas del pantano a lo largo de todo el camino son espectaculares. El sendero enseguida supera la primera barrera rocosa y gira hacia la derecha colocándonos en frente del Puro por su cara sur. En cuanto el camino llega debajo de las verticales paredes empieza una serie de 3 flanqueos a cada cual más expuesto. El primero es una preciosa y ancha repisa rocosa, se atraviesa una tupida zona de bajo bosque y se llega al 2º, un feo talud terroso, lleno de zarzas, donde no hay nada a lo que echar mano excepto un pasamanos de cuerda ya un poco descolorida, que te deja al pie de una fuerte pendiente que lleva a un collado donde y comienza el último: otra repisa rocosa bastante incómoda ya que obliga a agacharse bastante, también protegida por otra cuerda fija.
L1: empieza con corto y vertical resalte con bastantes pies, pero no manos. Hay un largo aleje desde el primer parabolt hasta el siguente seguro, al comienzo de una fisura estrecha bien protegida por dos parabolts y gran número de roñosos clavos con argollas del año de la polca que te permiten ir subiendo sin tocar la roca para nada a los que no tenemos nivel suficiente (6b si lo puedes liberar, como Ana). Esta vía fue reequipada por Lorenzo Ortás y Cecilia Bruil en 2004, pero parece que sólo cambiaron buriles por parabolts sin añadir ningún seguro nuevo. La fisura te deja en una cómoda repisa donde está instalada la primera reunión con un par de parabolts además de una sirga colgada de 3 clavos.
L2, Ae, muy cortito, apenas 10-15 m, pero fuertemente extraplomado. Está perfectamente equipado para hacerlo con estribos. Eso sí para llegar a la reunión hay que abandonar las cómodas cintas y fiarse de nuevo de los gatos aunque sólo sea para un par de metros.
Del resto de los largos que quedan hasta cima no tengo información de primera mano, a parte de que estaba todo roto, muy roto.

La cuadrilla en el comienzo del sendero: Chema, Ana, Vanesa y Jorge
El primer flanqueo
Chema en el 2º flanqueo, el más guarripage
Ana a gatas en el último flanqueo
¿Frío? ¿Quién dijo frío?
¡Anda, qué comodo es esto de acerar!
El agüelo liderando la cordada en el L1!!!!!!
La única que liberó el L1
Pasando el rato en la R1, pues no lo hacen mal, ¿no?
L2, diferentes técnicas, diferentes estilos
El agüelo cerca ya de la R2: ¡ya voy, ya voy!

3 comentarios:

pincho dijo...

Menos mal que uno no se ve cuando está escalando!!!

Madre mia con el paso del buitre leonado!!!

Muy buen dia, desde luego.

Vane dijo...

Vaya con la cigüeña-gacela, mas bien el pato mareao..
Menos mal que aprendimos algo de la escuela burgalesa!!

Iñaki dijo...

Lo importante es subir (el estilo, bah!!! a quien le importa!!!) cansándose lo mínimo. Ahora que ya estáis iniciados en las técnicas burgalesas hay un techito en Peña Rueba que nos está esperando!!!!